1. COCINAR MÁS PORCIONES
Tener el hábito de cocinar en cantidades dobles y congelar una porción es una forma segura de reducir los desperdicios y sacar el máximo provecho de tus electrodomésticos. Del curry a la quinoa, cada vez que te falte inspiración o no tengas tiempo de cocinar, solo tendrás que abrir el congelador para disfrutar de un plato sano y listo para comer. También es la opción ideal si comes en el trabajo.